Dark Violet

Tema: Dark Violet Jue Nov 29, 2007 7:53 pm

Hola!Como nadie escribe por aqui...Ya soy la primera en algo!!^^

Bueno, al tema. Este microrrelato lo escribi hace unos años. Lo dejo aqui y me decis que os parece y como puedo mejorar vale? Wink

Es un pelin largo pero si algun dia teneis tiempo...Lo agradeceria mucho... Embarassed

^^ Gracias adelantadas!! Bss! Razz

<<De nuevo ese sueño.
Llevaba dos noches sin dormir por él. La aterraba. Se levanto de su cama y se acerco al espejo del lavabo.”Dios que cara de zombi”-Se decía Violeta. Desde la semana pasada no había conseguido dormir mas de cuatro horas seguidas.
Desde el accidente.
Cada vez que lo recordaba sentía deseos de haber podido ayudarle. De salvarlo en vez de quedarse parada como una tonta mirando como su hermano moría bajo a que coche en llamas.
Aquella imagen era tan dolorosa...
Tampoco se podía decir que sus padres estuvieran mejor que ella. Fue un duro golpe enterarse de que su hijo mayor había muerto en un accidente de coche y que su hija había sido hospitalizada por diversas quemaduras.
Violeta no había hablado casi nada desde su regreso a casa. Se encerró en la habitación de Darek y, se tumbo en su cama y se quedo dormida allí, acurrucada junto al reproductor MP3 de su hermano.
Sus padres propusieron llevarla a un psicólogo, por si el fuerte trauma la había trastocado, pero ella siempre se negaba.
”No os preocupéis. Ya lo he superado-decía-No necesito ir a ningún majara de estos que lo único que hacen es chuparte el cerebro y el dinero.
Ella sabia que eso no era del todo cierto. Ya esta era la segunda noche sin
dormir y, quisiera o no, lo notarían. Ese maldito sueño la asaltaba en mitad de la noche y lograba desvelarla por completo.
Era lunes. Las cuatro de la madrugada pero lunes a fin de cuentas. Abrió suavemente la puerta de su habitación y se introdujo en la de Darek.
No había dejado que sus padres entrasen en ella. Se había convertido en su santuario.
Desde el día del accidente se había encerrado en él y había estado buscando la pequeña llave que abría “El cofre del Tesoro”,como él solía llamarlo.
No sabía dónde estaba la dichosa llavecita. Pero, sabia que estaba ahí. En algún lugar de la habitación.
Busco por todas partes. Debajo de su cama, entre su ropa... Su ropa...
Aún olía a él...
¿Cómo había podido dejarla sola?¿Cómo había podido abandonarla de aquella forma?
Él era todo lo que tenía. Su apoyo. En el instituto siempre habían estado juntos. No porque no tuviera amigas, porque las tenía, sino porque prefería estar con él.
Él la escuchaba mientras sus amigas exigían ser escuchadas y él la ayudaba cuando sus amigas le pedían ayuda.
Aún no les había dicho lo que había ocurrido, lo del accidente. Ni siquiera a Sara, su mejor amiga. ¿Para qué iba a hacerlo?¿Para que la consolaran? No necesitaba eso. Lo necesitaba a él.
De pronto su mano tropezó con una pequeña cajita hábilmente escondida debajo de la estantería. En su tapa se adivinaba la inscripción Carpe Noctem.
La abrió lentamente mientras un torrente de recuerdos recorrían su mente. Recuerdos de su infancia junto a su hermano, los momentos que habían pasado juntos...Y allí estaba. No la había visto desde hacía años. Una pequeña llave dorada.
Miró el pequeño cofre que se veía debajo de su cama y se precipitó hacia él antes de pararse en seco.
No tenía derecho a violar la intimidad de su hermano por muy lejos que
estuviera. No. No podía.
Se llevó la pequeña llave al corazón y con lágrimas en los ojos abandonó apresuradamente la habitación y entro en la suya.
Cogió un cordón de cuero y con él se ató la llave al cuello.
Ella la guardaría.
Las siete.
Dentro de unos minutos sus padres se despertarían, harían el desayuno y la “despertarían”.
Abrió su armario y se puso su falda negra, una camiseta del mismo color y unas botas también negras. Se maquilló un poco y se fue a la cocina, donde su madre la esperaba con una bronca fortísima por su nuevo cambio de imagen.
-¡Por Dios!¡Pareces una muerta hija!¡Ve a cambiarte ahora mismo!
-Mama, ya soy mayorcita como para vestirme como quiera.
-De acuerdo, si es lo que quieres...Que te vaya bien hoy en el instituto.
Y, cogiendo una tostada, se despidió de Violeta con un beso y se fue a trabajar.
Violeta miro su reloj e hizo lo propio. Llegaba tarde a clase.
Cuando entró en ella todos sus compañeros enmudecieron y comenzaron a burlarse de su aspecto. Sus amigas, Sara y Maria, se la habían quedado mirando con cara de horror y cuando Violeta se dirigió hacia un asiento vacío junto a ellas dijeron apresuradamente:-Lo siento Violy. Esta ocupado.
La chica, un poco dolida por haber sido rechazada incluso por sus mejores amigas, optó por sentarse en un pupitre situado al final de la clase.
Ya en el recreo, Violeta no intentó acercarse ni a Sara ni a Maria. La manera en la que la habían mirado... Y todo por haberse vestido acorde a sus sentimientos.
No lo veía justo. Todavía no se lo creía. No se merecían que ella compartiera sus sentimientos con ellas después de eso. Nunca mas.
-¿Por qué lloras?-Dijo una voz junto a ella.
¿Llorando? No se había percatado de que tenía los ojos hinchados y la cara húmeda por las lágrimas.
-¿Eh?-Dijo Violeta alzando la mirada en dirección a la procedencia de la voz.
Se trataba de una chica de su edad. Vestía una falda morada con una blusa negra de mangas anchas. De su cuello y muñecas colgaban collares llenos de extraños símbolos. Sus ojos estaban llamativamente pintados de color negro, al igual que sus labios.
-Me llamo Tiffany, pero prefiero que me llamen Deathly.
-Ho...Hola. Yo soy Violeta.
-Es muy bonito. Es que te he visto aquí, sola y llorando, y he pensado que te vendría bien un poco de compañía. ¿Me equivoco?
-En absoluto-Dijo Violeta secándose las lágrimas-Es que hoy ha sido un día horrible.
Y comenzó a contarle todo lo que había ocurrido. Lo de Darek, lo de sus amigas...
Comenzaron a hablar mas frecuentemente. Empezaron a juntarse en los recreos, después de clase...Y se hicieron muy buenas amigas.
Al cabo de un tiempo Deathly le propuso el ir a conocer a los amigos con los que salía los fines de semana y Violeta aceptó de inmediato.

Habló con su madre y esta estuvo de acuerdo. “Ya era hora de que empezases a salir de nuevo a la calle” le decía.
Y allí estaba. Se encontraba en el Dark Hole, el local gótico más famoso de Madrid.
El lugar era de lo más pintoresco. Las paredes estaban cubiertas de estanterías llenas de libros con títulos como “Drácula” o “la verdadera historia de Vlad Tepes”, se encontraba rodeada de gente desconocida y vestida con extravagantes trajes y vestidos imposibles.
Las luces, focos rojos y violetas, hacían que la sala tuviera un aire misterioso inigualable y Violeta sentía como la euforia le recorría el cuerpo.
El lugar era maravilloso. Y cuando se dio cuenta Deathly se acercó hacia un grupo de jóvenes góticos que estaban sentados en un sofá al final de la sala.
-Violy te presento a: Darky-dijo señalando a una muchacha que llevaba el pelo llamativamente pintado en tonos rojizos y negros-, Mystica-refiriéndose a la chica que vestía un traje que a Violeta le resultó espectacular- y Darío.
¡Dios! ¡Qué guapo era! A pesar de su macabro aspecto Violeta se quedó embobada. ¿Cómo no se había fijado en él antes?.
Tras la presentación Violeta se sentó con ellos y comenzó a conocerlos poco a poco a todos, especialmente a Darío.
Los meses pasaron.
Salía todos los fines de semana con sus nuevos amigos. Ya le daba igual que sus compañeros se burlaran de ella de vez en cuando, e incluso soportaba los insultos que le proferían las que antaño habían sido sus mejores amigas.
Estaba completamente enamorada de Darío y en ese momento era la persona más feliz del mundo.
Un día, tras regresar de la calle y subir las escaleras de su casa sigilosamente para no despertar a sus padres, Violeta reparó en que la puerta del cuarto de Darek estaba entreabierta, invitándola de nuevo a pasar. Y así lo hizo.
Lo primero en lo que se fijó al entrar en la habitación fue en el pequeño cofre que la esperaba a los pies de la cama de su hermano.
Se agachó junto a él e inconscientemente extrajo la pequeña llave que siempre llevaba colgando del cuello.

Con ella, abrió lentamente el pequeño cofre. Era el instante que había estado esperando toda su vida y cuando contempló su interior no pudo contener mas las lágrimas.
Dentro del cofre había una foto de Darek junto a ella en Santiago.
La habían hecho sus padres minutos antes de entrasen a comer en una marisquería para celebrar el cumpleaños de su padre.
En ella salían los dos sonriendo y señalando unas langostas que en un rato iban a comerse.
Siempre la había querido pero él nunca había accedido a dársela porque decía que ella la estropearía y que era demasiado bonita para hacerle eso.
Violeta sonrió para sí cuando recordó ese comentario y se dio cuenta de que detrás de la fotografía había una pequeña anotación:
"Esperaba que tarde o temprano abrieras este cofre en cuanto
me descuidara un poco y no me equivocaba eh?
Jeje. Bueno, espero que la cuides y que sepas que siempre estaré contigo.
Muchos besos hermanita.
Darek. " >>

Tema: Re: Dark Violet Dom Dic 02, 2007 12:13 am

OOOOh!! Es muy bonito, aunque vas a continuar no? esque quiero saber si Darío acaba con Violeta o no.

Xd, está muy bien.

Tema: Re: Dark Violet Dom Dic 02, 2007 1:23 am

Intentare escribir mas lo prometo! Very Happy

Pero dentro de unos dias porque ahora con los examenes...puff!Pero en cuanto escriba aviso!

De verdad te gusta?Gracias! Razz

Tema: Re: Dark Violet Mar Dic 04, 2007 4:35 pm

Estás de guasa???

Claro que me gusta, sino no hubiera posteado, me encantaría hacerlo más a menudo en otros foros, (en Crepúsculo por ejemplo) pero desgraciadamente no he tenido mucho tiempo que digamos, y la conexión aquí no es muy buena y me desconecto cada dos por tres, en mi casa es otra historia, estoy deseando ir para poder navegar con tranquilidad xd.

Yo también etoy escribiendo una historia, pero a ver cuando la termino.